Existe un tiempo específico para curar las heridas del corazón o es una constante sanidad?
Durante un tiempo, me negué a pensar que estaba herido y que realmente necesitaba ayuda para sanar... siendo así un proceso complicado.
Porque complicado? Porque cuando se identifican los problemas, es mas fácil actuar y tomar acciones para poder erradicar la situación. Pero qué pasa cuando nos negamos constantemente a entender que estamos mal?
Simplemente aplazamos la sanidad y seguimos inmersos en un problema que parece que nunca se acaba.
Aceptar las heridas.
Cuando pasamos por situaciones duras o que nos han dañado, lo primero que debemos hacer es aceptar que estamos rotos, que simplemente no podemos. Allí la primera acción correctiva: Reconocer.
Reconocer no siempre es tan fácil como suena, pues el dolor llega a ser un estado emocional tan cómodo, y con esto no me refiero a que sea lo ideal, pero usualmente es como caer en un hoyo de conejo, que entre mas oscuro mas profundo, y como siempre, es más fácil seguir cayendo que detenerse y hacer el esfuerzo de salir de allí.
Identificar el motivo.
Ahora, después de reconocer, lo siguiente es saber porque estamos heridos. Qué fue lo que sucedió, qué fue lo que hicimos, o nos hicieron para estar en este estado. No siempre significa que alguien nos ha hecho algo, es posible que nosotros mismos propiciamos una herida. Pero cualquiera que sea el motivo, debemos ser honestos y examinar el motivo de nuestro dolor.
Los motivos pueden ser desde los justificados hasta los innecesarios. Qué significa justificado? Pues probablemente alguna acción, palabra o simple interpretación que provocó un daño. Los innecesarios, pues puede ser hasta las cosas más insignificantes que no tienen sentido que nos causen un problema o una herida.
Acción de recuperación.
Hay dos cosas que podemos hacer cuando estamos en un estado de dolor, que como se mencionó en los párrafos anteriores, puede ser un hoyo oscuro de una constante caída libra donde cada vez vamos mas y mas abajo y profundo, y lo otro, es reaccionar y tomar acción para salir adelante, aunque esta última suele ser la mas complicada.
Qué podemos hacer para salir adelante? Simple... encontrar la cura, la medicina, y creo que no hay otra más poderosa que Dios.
Es indescriptible como cuando confiamos en Dios, Él puede darnos la salida por mas dolidos o angustiados que estemos.
Aquí tengo que reconocer, que no es fácil tomar esa decisión y que tampoco es fácil reconocer que a pesar de sentirme mejor, no estaba sano por completo.
Sanidad por completo.
Pareciera que es algo tan fácil, pero no, es un proceso largo... que es una constante sanidad. Y porqué constante? Pues aunque nos neguemos a entenderlo, somos tan propensos a ser lastimados, pues nuestro corazón de ser humano, es tan vulnerable que casi es inevitable pensar que siempre estamos al 100 % bien. Y en caso de serlo, que bonito debe sentirse estar en un estado tan anhelado.
Lo único que me queda decir, es que en ese constante proceso de sanidad, el único que puede dar respuestas, un caluroso toque, un cálido abrazo, etc, es Dios. El único que siempre va a esperarnos con los brazos abiertos para tomar nuestro corazón y unirlo de nuevo a pesar de estar en pedazos.
Qué puedo decir? Es un proceso, constante, pero seguir y confiar en Él es la respuesta...
"Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; Y salva a los contritos de espíritu."
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